Muchos gourmets tienen esta costumbre: comen fruta después de la comida principal.
En otras palabras, como postre suelen servir manzanas, peras, plátanos, naranjas y otras frutas.
¿Pero es esto correcto? Molestemos a quienes gustan de comer fruta inmediatamente después del almuerzo o de la cena: este hábito alimentario es muy peligroso.
Comer frutas dulces después de las comidas tiene consecuencias desagradables.
Pueden ocurrir problemas relacionados con el tracto gastrointestinal.
Por qué no deberías comer fruta después de las comidas
Las frutas agridulces son una fuente de “azúcares simples”.
El proceso de digestión de dichos componentes puede verse gravemente ralentizado debido al almidón.
Y la fuente de esto último son algunas guarniciones populares (pasta, patatas, etc.)
El proceso de asimilación de los hidratos de carbono simples puede no ir del todo bien debido a las grasas, que también pueden abundar en el almuerzo o la cena.
Los resultados son tristes: aumento de la carga en el tracto gastrointestinal, ruidos sordos e hinchazón.
¿Cuándo se puede comer fruta?
Entonces, llegamos a la conclusión de que no se deben comer frutas después de la comida principal.
Pero puedes comer un plátano o una pera media hora antes del desayuno o del almuerzo.
Autor: Antón Kurchev