La habitación infantil es un espacio que debe adaptarse a la edad, intereses y necesidades del niño.
Para que tenga exactamente este aspecto, compre muebles transformables para decorar esta habitación: este es el primer consejo.
Una cama alta con un escritorio debajo ahorra espacio y es adecuada para niños de 5 a 15 años. Una mesa y una silla con altura regulable ayudarán a mantener la postura del estudiante.

La lectora Olga de Novosibirsk comenta: “Mi hijo lleva 6 años usando la misma mesa, ¡sólo cambiamos la altura!”
El segundo secreto es una base neutral. Las paredes en tonos suaves (beige, gris, menta) permiten cambiar la decoración sin necesidad de reformas.
El tercer truco es el almacenamiento modular. Los estantes abiertos, las cestas con ruedas y los paneles magnéticos son fáciles de reorganizar y completar.
Por ejemplo, los juguetes se pueden guardar en cajas de colores vivos y los libros de texto en estantes con secciones regulables.
El cuarto punto es la zonificación. Divide la habitación en zonas usando alfombras, biombos o color.
Deje que el área de juegos tenga una alfombra brillante, el área de estudio tenga una mesa monocromática y el dormitorio tenga un dosel.
El quinto consejo son los textiles. Las fundas de almohadas, colchas y cortinas se pueden cambiar a medida que el niño crece. Por ejemplo, a los 5 años, con estampados de dibujos animados; a los 12, con patrones geométricos.
La sexta técnica es la decoración “adulta”. Unos carteles enmarcados, un globo terráqueo o un reloj de pared añadirán seriedad sin pagar de más.
Un estudio de House Beautiful descubrió que los interiores flexibles reducen los costos de renovación tres veces.
El lector Dmitry de Rostov lo confirma: “Mi hija cambia la decoración ella misma: ¡la habitación crece con ella!”