Ahora tus huertos empezarán a dar frutos antes que los de tus vecinos.

26.02.2025 13:15

¿Alguna vez has notado que algunos jardineros ya tienen verduras en su mesa en abril, pero tú todavía estás buscando entre los paquetes de semillas?

Se trata de pequeños trucos que no están escritos en los libros de texto de jardinería.

Febrero es el momento perfecto para poner en marcha su «máquina de cosecha», y aquí le mostramos cómo hacerlo sin invernaderos ni fertilizantes costosos.

Calabacín
Foto: © Belnovosti

Imagínate: mientras otros sólo sueñan con su primer pepino, tú ya estás recogiendo perejil y rábanos. ¿Suena imposible? Pero todo comienza con una lámpara normal, un cartón de leche y tu refrigerador.

Sí, es el frigorífico el que puede convertirse en tu primer asistente. La estratificación de semillas no es sólo una palabra de moda, sino una forma real de despertar a los embriones “dormidos”.

Por ejemplo, las semillas de zanahoria o perejil envueltas en un paño húmedo y enviadas a la sección de verduras durante una semana germinan varias veces más rápido.

Pero no a todos los cultivos les gusta el frío. Los tomates y los pimientos, por el contrario, requieren calor y luz. Y aquí será útil una lámpara: una lámpara LED normal o una fitolampa, que sustituirá al sol de febrero.

Colóquelo sobre las plántulas de manera que la luz caiga al menos 12 horas al día y los brotes no se estirarán, sino que serán fuertes y jugosos.

Y ahora sobre el secreto principal: los contenedores para las plántulas. ¡Olvídate de las tazas compradas en las tiendas! Las botellas de plástico, los cartones de zumo e incluso las cáscaras de huevo funcionan igual de bien.

Corta la botella por la mitad, haz agujeros de drenaje en el fondo y listo. Estas "macetas" no sólo ahorran dinero, sino que también facilitan la replantación de plantas: basta con cortar el plástico sin dañar las raíces.

Y no te apresures a tirar las cáscaras de huevo: llénalas con tierra, siembra las semillas y, al plantarlas en el suelo, tritura con cuidado las cáscaras: se convertirán en fertilizante natural.

¿Pero qué hacer si no hay suficiente espacio en el alféizar de la ventana? ¡Utilice camas de jardinería verticales! Fije estantes con bandejas o bolsillos de tela para colgar en la pared. Esto no solo ahorrará espacio, sino que también creará un acogedor rincón verde en la casa.

Y en febrero ya puedes empezar a preparar el suelo en la parcela: esparcir nieve en los parterres para que se derrita más rápido y cubrir el suelo con una película negra.

El suelo debajo se calentará en cuestión de días y podrás sembrar cultivos resistentes al frío antes que nadie.

Y un último consejo: no te excedas con el riego. Las plántulas de febrero a menudo mueren no por el frío, sino por el exceso de humedad.

Riegue sólo cuando la capa superior del suelo esté seca y utilice agua a temperatura ambiente. Recuerda: incluso en febrero tu jardín ya está vivo: lo único que tienes que hacer es despertarlo.

Igor Zur Autor: Igor Zur editor de recursos de internet


Últimas noticias

Principales noticias

Todas las noticias