Los jardineros experimentados, los cultivadores de hortalizas y los residentes de verano no tiran las almohadas viejas.
Resulta que pueden ser bastante útiles en el cultivo de plantas. Por ejemplo, como fertilizante.
En este sentido, el relleno de plumas tiene un valor especial: es una fuente de materia orgánica para los representantes de la flora del jardín.

El método es aún más efectivo si las plumas de la almohada contienen compuestos nitrogenados.
En este caso las plantas crecen mucho mejor su masa vegetal.
Si las plumas contienen componentes que contienen azufre, la cosecha será de mayor calidad.
Y si contienen compuestos de silicio, la resistencia de los cultivos está garantizada.
Además de enriquecer el suelo con nutrientes, el fertilizante de plumas proporciona las condiciones para la formación de la estructura del suelo más óptima.
Al descomponerse, la masa de plumas crea un ambiente favorable para la reproducción de microorganismos beneficiosos, lo que tiene un efecto muy positivo en la fertilidad del suelo.
Según los jardineros experimentados, el método más eficaz es añadir plumas trituradas mezcladas con ceniza de madera a los agujeros al plantar verduras.
Se recomienda añadir unos 100 gramos de masa de plumas por cada metro cuadrado.
Las plumas también se pueden utilizar para hacer fertilizante líquido.
Se deben infundir tres vasos de material triturado en un recipiente con agua (10 litros) durante 10 días en un lugar cálido.
Posteriormente la solución se puede utilizar para la alimentación de las raíces de las plantas.