¿Tu gato acaba de tirar un jarrón de cristal del estante y ahora está sentado junto a los fragmentos con la cola en alto?
¿Estás seguro de que esto es una venganza por el rechazo de ayer a un regalo?
De hecho, los gatos no son capaces de vengarse. Sus cerebros no conectan "jarrón roto" y "castigo". Tu mascota no tiene ningún plan malvado: solo sigue sus instintos.

Por ejemplo, saltar a un estante podría ser un intento de atrapar un rayo de sol o una mosca voladora. Y el jarrón cayó porque el gato calculó mal la trayectoria o se asustó por un ruido repentino.
¿Por qué a los gatos les gusta tanto tirar cosas? En primer lugar, se trata de cazar. Los objetos en movimiento (aunque sea la sombra de una cortina) despiertan el instinto de persecución.
En segundo lugar, el aburrimiento. Si un gato no tiene juguetes, se entretendrá tirando bolígrafos y tazas.
En tercer lugar, atraer la atención. Cuando tu mascota se da cuenta de que después de que se cae el jarrón corres hacia él gritando, repite esto para provocar una reacción.
¿Cómo proteger tu hogar del caos felino? Cubre los bordes de los estantes con cinta adhesiva de doble cara: los gatos odian las superficies pegajosas. Coloque los artículos frágiles en armarios cerrados.
Compra una estructura de juegos alta con estantes y postes rascadores: si tu gato gasta energía trepando allí, sus jarrones permanecerán intactos.
Además, organice juegos diarios con una caña de pescar de plumas: 20 minutos de caza activa aliviarán el estrés.
Si tu gato empieza a dejar caer cosas con más frecuencia, revisa su visión. Las mascotas mayores o las razas con narices chatas (persas, exóticos) son peores a la hora de calcular distancias.
Y algunos gatos “se comportan” por estrés: por ejemplo, si aparece un perro nuevo en casa o cambia su horario de trabajo. En estos casos, un collar de feromonas o un spray con aromas calmantes pueden ser de gran ayuda.