¿Estás orgulloso de dormir 5 horas y lograr hacer todo lo que te propones en el mundo? Prepárate para recibir malas noticias.
Después de sólo una semana de privación de sueño, el cerebro funciona como una persona borracha: reacciones lentas, errores en tareas sencillas y fallos de memoria.
Y esto es sólo el comienzo. El desequilibrio hormonal hace que comas en exceso y tu sistema inmunológico se debilita tanto que incluso un resfriado leve puede provocar complicaciones.

El corazón se desgasta más rápido, aumenta el riesgo de diabetes y la piel envejece como ocurre con el estrés crónico.
Lo peor es que dejas de darte cuenta de lo cansado que estás: tu cuerpo se acostumbra a la adrenalina y al cortisol, enmascarando el problema.
Es posible recuperar un sueño saludable, pero tendrás que revisar tus horarios: ir a dormir antes de medianoche, guardar los dispositivos una hora antes de acostarte y crear rituales, como una ducha caliente o la meditación.
Recuerda: no puedes dormir “antes” y una hora de sueño antes de las 12 de la noche equivale a dos horas después.
Pero ¿cómo exactamente la falta de sueño te mata desde dentro? Imaginemos que durante la noche el cerebro tiene que “limpiarse” a través del sistema glinfático, eliminando toxinas.
Si no duermes lo suficiente, se acumulan placas de beta-amiloide (asociadas con el Alzheimer). En 10 años esto podría provocar demencia.
Además, la falta de sueño altera la producción de leptina, la hormona de la saciedad. Consumes entre 300 y 500 calorías más al día y tienes antojos de alimentos grasos y dulces.
Dormir menos de 6 horas por noche aumenta el riesgo de morir de enfermedad cardíaca en un 48%.
Y si trabajas en el turno de noche, tu cuerpo nunca se adapta: tus ritmos circadianos se alteran, lo que conduce a la depresión y al cáncer.
¿Qué hacer? Cree una oscuridad total en el dormitorio (cortinas negras, antifaz), mantenga la temperatura entre 18 y 20 grados centígrados y compre una almohada ortopédica.
Y si no puedes dormir, no te muevas en la cama: levántate y lee un libro con poca luz. El cerebro debe asociar la cama únicamente con el sueño.